2020 07 ORDESA con JAIME y SARA
Este año Sara tenía muchas ganas de volver a hacer una ruta por la montaña y pasar un poco de hambre, y con esto del COVID los refugios estaban limitados a la mitad y tampoco era plan de compartir litera por lo que la opción de ir con la tienda de campaña era ideal.
Como hace dos años se quedaron con las ganas de subir un 3000, y les gusto lo de ir viendo neveros, se me ocurrió la idea de subir al Perdido, ver el glaciar colgado desde el balcón de Pineta y algún nevero veríamos. Si el perdido se complicaba también estaba la opción de subir el Pico del Taillón, en la brecha de Rolando, que es muy fácil y en una hora desde el collado se hace cumbre.
Con todas estas ideas buscando recorridos en wikilock, la idea inicial fue subir el primer día a Goritz, segundo día dormir próximos al collado de Añisclo, para lo cual había que bajar a la Fuenblanca y subir, el tercer día por la Faja Tormosa llegar al Balcón de Pineta y dormir junto al lago de Marbore admirando el glaciar del Perdido, el cuarto día subir por una chimenea de trepada poco difícil hasta el cuello de Marboré y según como esté subir hasta la cumbre del Monte Perdido o bajar al lago helado y seguir descendiendo a Goritz, el quinto día, llegar hasta la Brecha de Rolando pasando por la Gruta del Casteret, y una vez aquí decidir si subimos al pico de Taillón, dormir en uno de los muchos vivaq que debe de haber por la zona, el sexto día bajar al refugio de Sarradets y acercarnos a ver la cascada de Gavarnie, y luego bajar por el valle de Bujaruelo. Según la hora dormiríamos en Bujaruelo a un altura antes de que aparezca el bosque, o ya seguiríamos bajando hasta el coche. Todo esto eran las intenciones, afortunadamente como llevábamos la tienda y comida, las etapas las podíamos alargar, acortar o desviar.
Día 1 : 08/07/2020
wikilock Pradera Ordesa - Cola Caballo
Salimos de Madrid sobre las 10:00 y parando únicamente a tomar un café llegamos a Torla sobre las 15:30, aprovechamos para comer la ensalada de pasta que llevábamos y esperamos hasta las 16:15 que abrieran el centro de interpretación para coger el autobús que sube al aparcamiento. Luego resultó que hasta el sábado se podía subir en coche y no había autobuses, lo visitamos rápidamente, tampoco hay mucho que ver, y aprovechamos para subir esperando que no estuviera el aparcamiento lleno.
Salimos sobre las 18:00 del aparcamiento de la Pradera de Ordesa, y ya en el camino se veía poca gente y solo nos cruzábamos con los que bajaban. Es un camino fácil de recorrer, en el que continuamente estás viendo las cascadas del río, y con tramos en los que la pendiente es mayor pero luego vuelve a suavizarse, a mitad del camino hay una fuente, hay algunos refugios a modo de cabaña de madera en los que no se puede pernoctar, únicamente están en caso de tormenta o accidente.
En los desvíos del camino para bajar a ver las cascadas del río Arazas, merece la pena cogerlos y seguir luego por la senda que vuelve al camino principal.
Una vez llegados a las Gradas de Soaso, eran las 20:45, estábamos solos en el valle, daba la sensación que lo hubieran cerrado para nosotros, el valle de Ordesa, es el Parque Nacional más famoso y asequible de Pirineos y ¡no había nadie!
Subimos por encima de las gradas de Soaso y para ser el primer día y con las mochilas cargadas de comida, aunque la intención era llegar por lo menos por encima de la Cola de Caballo, como ya eran las nueve de la noche, nos apartamos el camino y en una especie de terraza pusimos la tienda, nos comimos la empanada que habíamos cargado con ella y a dormir hasta la mañana siguiente.
Día 2: 9 de julio de 2020
wikilock Cola Caballo - Goritz - Añisclo
A las 7 de la mañana nos despertamos y ya se veía gente que supuestamente había bajado de Goritz, por lo que rápidamente quitamos la tienda y nos pusimos en marcha, 30 minutos más tarde llegamos a la cascada de la Cola de Caballo, el Sol iluminaba sólamente los bordes de las paredes del valle y la cascada bajada repleta de agua con un ruido ensordecedor, aprovechamos a desayunar encima de una roca contemplando el paisaje y buscando el camino de subida.
Este año Sara tenía muchas ganas de volver a hacer una ruta por la montaña y pasar un poco de hambre, y con esto del COVID los refugios estaban limitados a la mitad y tampoco era plan de compartir litera por lo que la opción de ir con la tienda de campaña era ideal.
Como hace dos años se quedaron con las ganas de subir un 3000, y les gusto lo de ir viendo neveros, se me ocurrió la idea de subir al Perdido, ver el glaciar colgado desde el balcón de Pineta y algún nevero veríamos. Si el perdido se complicaba también estaba la opción de subir el Pico del Taillón, en la brecha de Rolando, que es muy fácil y en una hora desde el collado se hace cumbre.
Con todas estas ideas buscando recorridos en wikilock, la idea inicial fue subir el primer día a Goritz, segundo día dormir próximos al collado de Añisclo, para lo cual había que bajar a la Fuenblanca y subir, el tercer día por la Faja Tormosa llegar al Balcón de Pineta y dormir junto al lago de Marbore admirando el glaciar del Perdido, el cuarto día subir por una chimenea de trepada poco difícil hasta el cuello de Marboré y según como esté subir hasta la cumbre del Monte Perdido o bajar al lago helado y seguir descendiendo a Goritz, el quinto día, llegar hasta la Brecha de Rolando pasando por la Gruta del Casteret, y una vez aquí decidir si subimos al pico de Taillón, dormir en uno de los muchos vivaq que debe de haber por la zona, el sexto día bajar al refugio de Sarradets y acercarnos a ver la cascada de Gavarnie, y luego bajar por el valle de Bujaruelo. Según la hora dormiríamos en Bujaruelo a un altura antes de que aparezca el bosque, o ya seguiríamos bajando hasta el coche. Todo esto eran las intenciones, afortunadamente como llevábamos la tienda y comida, las etapas las podíamos alargar, acortar o desviar.
Día 1 : 08/07/2020
wikilock Pradera Ordesa - Cola Caballo
Salimos de Madrid sobre las 10:00 y parando únicamente a tomar un café llegamos a Torla sobre las 15:30, aprovechamos para comer la ensalada de pasta que llevábamos y esperamos hasta las 16:15 que abrieran el centro de interpretación para coger el autobús que sube al aparcamiento. Luego resultó que hasta el sábado se podía subir en coche y no había autobuses, lo visitamos rápidamente, tampoco hay mucho que ver, y aprovechamos para subir esperando que no estuviera el aparcamiento lleno.
Salimos sobre las 18:00 del aparcamiento de la Pradera de Ordesa, y ya en el camino se veía poca gente y solo nos cruzábamos con los que bajaban. Es un camino fácil de recorrer, en el que continuamente estás viendo las cascadas del río, y con tramos en los que la pendiente es mayor pero luego vuelve a suavizarse, a mitad del camino hay una fuente, hay algunos refugios a modo de cabaña de madera en los que no se puede pernoctar, únicamente están en caso de tormenta o accidente.
En los desvíos del camino para bajar a ver las cascadas del río Arazas, merece la pena cogerlos y seguir luego por la senda que vuelve al camino principal.
Una vez llegados a las Gradas de Soaso, eran las 20:45, estábamos solos en el valle, daba la sensación que lo hubieran cerrado para nosotros, el valle de Ordesa, es el Parque Nacional más famoso y asequible de Pirineos y ¡no había nadie!
Subimos por encima de las gradas de Soaso y para ser el primer día y con las mochilas cargadas de comida, aunque la intención era llegar por lo menos por encima de la Cola de Caballo, como ya eran las nueve de la noche, nos apartamos el camino y en una especie de terraza pusimos la tienda, nos comimos la empanada que habíamos cargado con ella y a dormir hasta la mañana siguiente.
Día 2: 9 de julio de 2020
wikilock Cola Caballo - Goritz - Añisclo
A las 7 de la mañana nos despertamos y ya se veía gente que supuestamente había bajado de Goritz, por lo que rápidamente quitamos la tienda y nos pusimos en marcha, 30 minutos más tarde llegamos a la cascada de la Cola de Caballo, el Sol iluminaba sólamente los bordes de las paredes del valle y la cascada bajada repleta de agua con un ruido ensordecedor, aprovechamos a desayunar encima de una roca contemplando el paisaje y buscando el camino de subida.
El GR10 está muy bien marcado y no tiene pérdida, pero nosotros queríamos ir por el camino de las clavijas de Goritz, por lo que, aunque hay un cartel, hay que deducirlo e ir intuyendo los hitos, a las 9:00 ya estábamos subiendo por las clavijas, al ser las primeras impresionaron un poco, pero cuando llegamos arriba vimos que un francés estaba bajando descalzo, dejó la mochila y cuando terminamos volvió a subir a por sus hijas que debían de tener 8 o 10 años,"C'est facile?
Bueno pues ya estamos en el camino con marcas rojas y blancas, hemos tardado en subir las clavijas una hora, la subida hasta el refugio se hace larga, en el mapa parece que está al lado, pero después de una hora, cuando las fuerzas empiezan a flojear se ve una construcción al fondo que no se sabe lo que es, en otra hora llegamos al refugio de Goritz, desde la cola de caballo hemos tardado algo más de 3 horas.
Son las 13:00 aprovechamos para coger agua que no hay en todo el camino, comer descansar y como es pronto seguimos la ruta detrás de unos que nos dicen que van a la Punta de las Olas.
El camino hacia Añisclo sale desde la estación meteorológica, al principio es un poco ascendente hasta el collado de Arrablo o de Goritz (2343m) pero sube rápidamente en 45 minutos hemos llegado.
Desde aquí las vistas son impresionantes, el valle de Ordesa, hacia la Brecha de Rolando, la Punta de las Escaleretas y el pico de Añisclo o Soum de Ramond, que nos tapa la cumbre del Monte Perdido, cubierto permanentemente por una nube, y al frente la bajada por el Barranco de Arrablo que nos lleva hasta el valle de Añisclo.
Las nubes altas amenazan lluvia y empiezan a caer gotas, aguantamos un poco pero acabamos poniéndonos los ponchos, el terreno al ser calizo, muy poroso, absorbe el agua y evita que te resbales. Afortunadamente solo ha sido amenaza de lluvia y enseguida deja de llover.
La bajada se hace entretenida, con zonas de destrepe, en las que si no eliges bien los hitos se puede complicar un poco. Enseguida llegas al bosque y se puede coger agua de los arroyos, de hecho hay un momento en que el camino desaparece y afortunadamente Jaime se da cuenta que al otro lado del río hay un hito, ¡pues tendremos que cruzar por aquí!
Ya llevamos unas 2 horas desde el collado sin parar y el cansancio se empieza a notar, un poco más abajo aparece el bosque y la cascada de la Fuenblanca, soltando una grán chorro de espuma blanca desde en medio de la pared creando un río que no se puede cruzar, aprovechamos para coger agua, refrescarnos los pies y comer un poco. Ya estamos en el puente sobre el río Bellós (1620 m) Son las 17:45 y hemos tardado unas 3 horas desde el collado en descender 700 m.
Pero la jornada no se acaba aquí, al ser un Parque Nacional (PN) las zonas de pernocta están limitadas y a partir de la Fuenblanca está permitido. Podríamos buscar un sitio pero todavía es pronto así que decidimos apurar un poco más y seguir subiendo hasta encontrar una zona llana. Subimos hasta que dejamos abajo los árboles y después de una hora el valle se abre y el terreno se vuelve más plano encontrando una zona de prado ideal para montar la tienda (1850m), son las 18:00, buena hora para empezar a cocinar y reponer fuerzas. ¡Y además hay cobertura! Bueno solo para conseguir que salga algún mensaje,
Resumen del día: salimos a las 8:00 desde 1750 m, 30 minutos a la Cola de Caballo y 1 hora en subir las clavijas (1950m) y dos horas más en llegar a Goritz (2200m). Descanso y seguir subiendo hasta el collado de Arrablo (2343m) en 45 minutos, llevamos un desnivel acumulado de 600 m y 3h y media sin paradas. Desde aquí bajar 700m hasta el puente del río Bellós en Añisclo en 3h, pequeño descanso y de nuevo otros 250m de subida en una hora.
Día 3: 10 - julio - 2020.
Como todas las noches al amanecer se nota el frío, lo cual está bien porque te ayuda a despertarte con las primeras luces del día.
Como todos los días, desayunamos los cerales rellenos de chocolate y distruibuimos el peso en las mochilas, Sara las cenas, Jaime la comida y las dos botellitas de agua, y el resto yo. Está nublado y hace frío por lo que salimos abrigados.
A las 9:00 empezamos desde los 1850m vamos subiendo ganando altura rápidamente, viendo como el valle se queda a lo lejos, lás ultimas rampas se hacen largas, y es que tardamos 3 horas en llegar al collado de Añisclo (2450 m )
En el collado nos deleitamos con la vista, hace frío y nos volvemos a poner los forros, aprovechamos para descansar y comer algo, y mientras contemplamos las vistas del valle de Pineta con sus largas y empinadas paredes, con los Llanos de la Larri al fondo y la empinada subida que se intuye desde la esplanada de Pineta en donde está el Parador y punto de partida y llegada de todos los caminos.
Viendo el panorama y la cantidad de nieve por las cumbres, decidimos que cambiamos de ruta y que en vez de hacer la faja Tormosa, que bajando 500m nos llevaría, en ligero ascenso por los 1900m y luego baja a 1650m para encontrarse con el camino que sube 1000m de desnivel, por unas empinadas Z, hasta el Balcón de Pineta (2600m), y aquí dormiriamos, un palizón al que habría que sumas las 3 h anteriores. Y lo peor de todo es que nos quedaríamos encerrados en el Circo de Marbore al no poder subir al collado por la nieve.
Así que miramos el mapa y a propuesta de Sara, nos aventuramos a volver a Goritz por la Faja de las Olas, nos habían dicho que tenía neveros y hacía falta crampones, por lo que el acuerdo fue que si se complicaba nos dabamos media vuelta y cuando nos cansaramos poniamos la tienda y hasta el día siguiente. Despues de 1 hora de deliberaciones nos ponemos en marcha a las 12:50
Como no estaba planeado, no tenía ese track y costó un poco encontrar el camino, pero casi por intuición una vez que se alcanza el collado de las Olas o de los Maquis, ya no tiene pérdida, de hecho es una variante del GR10, por lo que está indicado.
Nada más empezar tenemos que sortear el primer obstaculo, lo que sería un pequeño torrente, se ha convertido en una cascada y la tenemos que pasar con riesgo de resbalar por las rocas mojadas y el agua que te golpea como si fueran palos. Nos ponemos los ponchos y adelante, prueba superada y cogemos ánimos.
Mas adelante, a hora y media del collado, en las clavijas (2750m) vemos un chico que viene le observamos para ver la dificultad y nos comenta que no hace falta crampones en ningún momento, más animos para pasar las clavijas,
Tiene un único paso de dificultad en el que te quedas colgado de la cadena, el resto la cadena es por seguridad, el terreno estába mojado y yo lo pude pasar sin problemas, a los niños les obligué a que estuvieran todo el tiempo agarrados a la cadena, en 10 minutos está superado. No es dificil pero si que impresiona.
El resto de la faja no tiene dificulta, únicamente una zona que el camino se estrecha y es un poco aérea. Pero las vistas son impresionantes, se distingue claramente como los dos lados de las paredes del valle son complementarios como si pudieran encajarse un lado con el otro. Esto fué provocado por que en los movimientos tectónicos se origino un sinclinal dejando una franja de rocas más blandas que han sido erosionadas por la lluvia..
Durante todo el camino no comimos nada hasta que de nuevo llegamos al collado de Arrablo, dos horas desde las clavijas, ya sintiendonos cerca del refugio y a salvo de las nubes que se aferraban a las cumbres nos relajamos y bajamos con tranquilidad a Goritz, informamos que ibamos a plantar la tienda y agradecieron la información del estado de la Faja de las Olas.
Al ser fin de semana se notó mayor afluencia de gente, la mayoría habían reservado la cena en el refugio, por lo que pusieron las tiendas en la zona próxima, nosotros nos apartamos más abajo como si estuvieramos solos.
Resumen:
Inicio Valle Añisclo, zona Valle Medio, a 1850 m, subida. de 600m en 3 horas al collado de Añisclo (2450m). Parada de 1 hora y continuación hacia el collado de los Maquis y la Faja de las Olas hasta el collado de Arrablo 3horas y media más 30 minutos de bajada a Goritz. Tiempo total de 9 a 18:00 en movimiento 7 horas un desnivel acumulado positivo de 900 m y negativo de 700 m.
Día 4 : 11 - julio - 2020
Wikilock Goritz - Casteret - Mondarruego (Cotatuero)
Nos despertamos a las 7:30 y ya vemos que no queda ninguna tienda de la noche anterior, el cielo está despejado y es un día ideal para subir temprano al Monte Perdido.
Nosotros partimos del refugio a las 9:00 y cruzando el puente nos dirigimos por el camino bien marcado hacia la Brecha de Rolando, en algún momento se pierden los hitos y toca trepar pero la dirección no tiene pérdida, hay que seguir hacia el fondo el valle. Como hay muchos neveros esta zona estaría muy bien para pernoctar, llano, tranquilo, bonito.
Vamos pasando por sucesivas zonas karsticas en las que se ve como el agua de los torrentes desaparece entre las grietas. Tras una corta subida llegamos al cuello de Millaris, donde nos cruzamos con un grupo que bajaban de la Punta Tobacor (2779m), es el piquito que se ve desde el circo Goritz, y que lo separa del de Cotatuero. Sin perder altura por un camino cómodo y rápido, en dos horas desde el refugio, llegamos al collado de Del Descargador (2500m), desde aquí se puede llegar a la Brecha de Rolando por el fondo del valle, por Plano de Millaris, o por media ladera ir ganando altura poco a poco por el camino que pasa por la Cueva del Casteret, nosotros seguimos los hitos del camino ascendente. Pasamos por un nevero pequeño y lo cruzamos sin dificultad, hasta que al ir subiendo, 30 minutos más tarde, nos encontramos con un nevero con fuerte inclinación y demasiado grande como para resbalarte y no parar hasta abajo. En este punto probamos los crampones ligeros de plástico con tornillos rosca-chapa y cuerda, que había fabricado para entrar en la cueva helada de Casteret, pero al segundo paso se soltaban las cuerdas, se rompían los tornillos,... un desastre. Sopesamos salvar el nevero con cuidado, pues según el mapa al otro lado del nevero estaba la cueva, pero era muy arriesgado así que, despues de dos horas, decidimo buscar un camino alternativo por encima del nevero, pegados a la pared, y nos encontramos con los hitos de otro camino y la misma Cueva de Casteret (2620 m), desde Goritz se llega en 2h y media,
Ya desde abajo se intuia que había una cueva en medio de la pared pero no coincidía con la señalización del mapa.
La Cueva de Casteret es de orígen glaciar, y se supone que las cascadas y columas de hielo que conserva son de hace millones de años, por lo que no se puede pasar.
Pasamos facilmente la valla y por lo menos en esta época no hace falta crampones, en su interior hay un lago helado, que en una zona ya se está derritiendo dos columnas pequeñas y una gran cascada blanca. También se ven trozos de columnas de 20 o 30 cm de diámetro que presumiblemente se han caido del techo, y es que incluso aquí dentro que estamos con los forros y tenemos frío, el retroceso de la época glaciar se nota.
A la entrada de la cueva hay un par de vivacs que en caso de tormenta estarán un poco resguardados.
Al salir las nubes ya tapan las cumbres y ante la dificultad de llegar a la Brecha de Rolando y que esté nublado y además que tampoco se pueda bajar porque en la cara norte habrá más nieve, decidimos que en vez de volver por Bujaruelo, bajabamos por la senda de Las Flores directamente a la Pradera de Ordesa.
A las 14:45 bajamos en dirección al Collado del descargador para dormir lo más cerca posible del camino de Senda de las Flores, en el mapa aparece que hay que bordear dos lagos, aunque atajamos y los cruzamos por encima de un lecho a ratos de fianas piedras y a ratos de un manto herboso y blandito. En estos puntos no hay donde coger agua a no ser que subas a los pies de algún nevero, de camino pudimos ver una manada de sarrios que se metían en alguna grieta a chupar la roca.
Los sarrios o rebecos del Pirineo, desde lejos parecen cervatillos, por el tamaño, pero si te acercas se distingue sobre todo por los cuernos que son cabras.
Vamos descendiendo tranquilamente, creando nuestro propio camino, hasta que llega un punto que el camino desciende bruscamente y se pierde entre rocas blancas, por fin encontramos un hito que nos guía por una zona empinada con algún destrepe hasta que llegamos a una depresión en donde si siguieramos llegaríamos a las clavijas de Cotatuero. Estamos a 2320 m y buscamos otros hitos que se dirijan el este, por intuición seguimos en esta dirección por una zona en la que el camino se pierde contínuamente y da la impresión que hay hitos de muchos caminos que continumente se entrecruzan, llega un momento que no sabemos si habremos bajado mucho, si nos encontraremos algún destrepe imposible, si habrá agua en algún sitio, ... así que me adelanto un poco y veo que a lo lejos hay unos acampados, voy a preguntarles y me confirman que es el camino de la faja de Las Flores y que el agua está como a unos 10 minutos. Vuelvo a por la mochila y a por Jaime y Sara y seguimos por el camino, les sobrepasamos y cuando vemos una zona llana relativamente cerca del único torrente que baja de un nevero, decidimos parar y plantar la tienda.
Son las 6 de la tarde, por hoy ya no tiene sentido avanzar más, un buen sitio para dormir y más o menos cerca del agua. Mientras Jaime y Sara montan la tienda yo me acerco al torrente que baja del nevero y subo por su curso hasta que encuentro el agua antes de que desaparezca. Mientras estiramos ponemos el agua a calentar, va a ser la última noche por lo que nos podemos dar un festín, de primero fideos chinos de gambas, luego los dos yatecomos que nos quedan y de postre un sopistan para irnos calentitos al saco.
Día 5 : 12 - julio - 2020
wikilock Faja Flores - Fajeta - Ordesa
Esta noche ha sido más fresca que las anteriores, desyunamos dentro del saco y como en la noche anterior mientras Sara y Jaime desmontan la tienda, yo voy a buscar agua, pero esta vez tuve que subir por lo menos 5 minutos más alto para encontrar agua, el nevero se había derretido durante la noche y el agua se filtraba antes.
Nos ponemos en marcha antes que otros días a las 8:30 ya estabamos en camino y el sol nos calentaba, estabamos en el camino correcto, nos encontramos con varios grupos y nos dijeron que teniamos que seguir los hitos hacia la punta que se vía al fondo.
Sin problemas inicialmente seguimos los hitos, aunque llega un momento que se pierden o se confunden con distintos caminos, en cualquier caso vamos siempre en dirección a lo que es la punta Gallinero. En algún momento vemos un hito y para llegar hasta el hay que destrepar, cruzar un nevero y fijarse bien para no volver a perder el camino, en cualquier caso simplemente hay que ir en dirección a la punta en la que se intuye que el camino da la vuelta.
De repente a las 9:30 se empieza a nublar, que mala suerte no vamos a poder tener buenas vistas, nos ponemos los ponchos, y en poco tiempo las gotas empiezan a ser más gordas, más intensas, mas duras, es granizo. Buscamos una zona un poco abrigada que por lo menos sea de tierra y no roca, rápidamente nos coordinamos y montamos el doble techo con las varillas, lo cual nos permite refugiarnos y sentirnos más seguros mientras los truenos parecen que van a romper las rocas. Despues de una hora acurrucados, el tiempo entre los rayos y truenos es mayor y se oyen más lejanos. Una hora y media más tarde, nos aseguramos que deja de llover y nos ponemos en marcha, son las 11:00. Delante nuestro había un grupo que también se dirigían por el mismo camino pero ya no les vemos, quiza nos habremos retrasado mucho.
Por fin estamos en Faja de las Flores, si no hubiéramos perdido el camino, no hubiéramos tenido que hacer algun destrepe, que por otro lado eran fáciles y divertidos.
Según avanzamos vemos lás nubes que se forman por la evaporación de la lluvia debajo nuestra, al principio vamos por encima del perfecto circo glacira de Cotatuero, y cuando el camino se hace más estrecho vemos todo el valle de Ordesa, con la cumbre del Monte Perdido presidíendolo al fondo, y como todos los días con una nube agarrada a su cumbre.
Aunque es muy aéreo, el camino no tiene dificultad, incluso con la cantidad de agua que ha caido, el terreno no está resbaladizo, las vistas son impresionantes.
A las 12:30 de nuevo se oyen truenos lejanos, las nuves pasan de largo por encima de nuestras cabezas, pensamos que la tormenta se habrá desplazado a otro valle, empieza a llover ligeramente y nos ponemos los ponchos que llevamos a mano, hasta que de repente vemos como el valle se llena de nuves, que empiezan a subir y la lluvia compienza a ser más intensa. Aprovechando que esta parte del camino tiene cornisas y abrigos en la roca, decidimos que mejor nos paramos y esperamos a que pase la tormenta.
Los truenos lejanos ahora están encima de nosotros y vemos los rayos caer delante nuestro, empieza a granizar con fuerza pero no pasa nada, nos hemos abrigado con la camiseta térmica, forro, abrigo y donde estamos no llega el agua. La temperatura ha caido bruscamente, y nos apretujamos contra la roca tapados por el saco extendido. El granizo da paso a chorros de agua que son batidos por el viento, saco el doble techo para que no se moje el saco, aquí no hay sitio para montar las varillas, entre tanto lo único que vemos es un espacio blanco y una cascada que se ha formado por encima de nuestra roca que afortunadamente apenas nos salpica. Ya habíamos comido antes por lo que para entretenernos nos comemos los chupachup gigantes que Sara nos advierte que guardemos el papel porque duran mucho. Al final Jaime y Sara, tapados con el doble techo acaban durmiendose. Yo permanezco vigilante y aunque parece que ha dejado de llover fuerte, todavía se ven cascadas que salpican el camino. A las 14:30 viene un gruo de jovenes totalmente calados incluso aunque lleven capas de agua, la tormente les ha pillado en el primer tramo, donde no hay sitio para resguardecerse y si paran se quedarían helados. Aprovechamos para levantarnos y seguir. Un poco más adelante hay otro grupo de montañeros más experimentados, que la tormenta les ha pillado justo en las clavijas, son un grupo de 6 y la mitad no habían bajado por lo que decidieron volver a subir a refugiarse en este punto que está habilitado a modo de vivaq. Nos dicen que han llamado a la guardia civil y les ha dicho que a las 18:00 se prevee otra tormenta y les aconsejan que bajen en cuanto puedan por la Fajeta en vez de las Clavijas de Salarons. Nos ofrecen acompañarnos si esperamos a que se preparen, así que eso hacemos.
Salimos un poco antes que ellos para no retrasarles y sin prblemas seguimos el camino de bajada que está bien marcado hasta la señalización de La Fajeta o Clavijas, en ambos casos dice que hay zonas de destrepe. Seguimos delante por el camino de la Fajeta, el sol empieza a calentar y nos quitamos la ropa de abrigo.
El destrepe por la Fajeta tiene pasos que se pueden considerar poco difíciles pero si muy expuestos, en algún punto se pierde el camino y hay que retroceder a volver a buscar los hitos, hasta que llegamos a la base del bosque justo en el punto que se cruza un torrente que por supuesto está muy crecido. Aprovechamos para coger agua, descansar y comer. A partir de aquí el camino de bajada es cansado pero sin dificultad, como la previsión era de lluvia sobre las 18:00 tampoco perdemos mucho tiempo y anque Sara se queja de que le duele la rotula, sigue sin para y a buen ritmo y a las 19:00 hemos llegado al coche.
Descansamos, metemos los pies en el agua helada del río Arazas, nos cambiamos y a las 20:00 salimos hacia Madrid. En 5 horas de coche llegamos a casa.
Resumen: Partimos por encima del circo de Cotatuero en lo que algunos mapas aparece como Mondarruego a a las 8:30, en 90 minutos se llegaría al inicio del camino de la Faja de las Flores. Nosotros paramos otros 90 minutos por la tormenta. La Senda de las Flores se tardaría en hacer 2 horas y luego bajar hasta la bifurcación de la Fajeta 1 hora y otras 2 horas hasta el aparcamiento. En total 7 horas de caminata y 1000 m de desnivel negativo, aunque el cansancio acumulado es desde las 8:00 hasta las 19:00 ¡casi 11 horas!
Día 4 : 11 - julio - 2020
Wikilock Goritz - Casteret - Mondarruego (Cotatuero)
Nos despertamos a las 7:30 y ya vemos que no queda ninguna tienda de la noche anterior, el cielo está despejado y es un día ideal para subir temprano al Monte Perdido.
Nosotros partimos del refugio a las 9:00 y cruzando el puente nos dirigimos por el camino bien marcado hacia la Brecha de Rolando, en algún momento se pierden los hitos y toca trepar pero la dirección no tiene pérdida, hay que seguir hacia el fondo el valle. Como hay muchos neveros esta zona estaría muy bien para pernoctar, llano, tranquilo, bonito.
Vamos pasando por sucesivas zonas karsticas en las que se ve como el agua de los torrentes desaparece entre las grietas. Tras una corta subida llegamos al cuello de Millaris, donde nos cruzamos con un grupo que bajaban de la Punta Tobacor (2779m), es el piquito que se ve desde el circo Goritz, y que lo separa del de Cotatuero. Sin perder altura por un camino cómodo y rápido, en dos horas desde el refugio, llegamos al collado de Del Descargador (2500m), desde aquí se puede llegar a la Brecha de Rolando por el fondo del valle, por Plano de Millaris, o por media ladera ir ganando altura poco a poco por el camino que pasa por la Cueva del Casteret, nosotros seguimos los hitos del camino ascendente. Pasamos por un nevero pequeño y lo cruzamos sin dificultad, hasta que al ir subiendo, 30 minutos más tarde, nos encontramos con un nevero con fuerte inclinación y demasiado grande como para resbalarte y no parar hasta abajo. En este punto probamos los crampones ligeros de plástico con tornillos rosca-chapa y cuerda, que había fabricado para entrar en la cueva helada de Casteret, pero al segundo paso se soltaban las cuerdas, se rompían los tornillos,... un desastre. Sopesamos salvar el nevero con cuidado, pues según el mapa al otro lado del nevero estaba la cueva, pero era muy arriesgado así que, despues de dos horas, decidimo buscar un camino alternativo por encima del nevero, pegados a la pared, y nos encontramos con los hitos de otro camino y la misma Cueva de Casteret (2620 m), desde Goritz se llega en 2h y media,
Ya desde abajo se intuia que había una cueva en medio de la pared pero no coincidía con la señalización del mapa.
La Cueva de Casteret es de orígen glaciar, y se supone que las cascadas y columas de hielo que conserva son de hace millones de años, por lo que no se puede pasar.
Pasamos facilmente la valla y por lo menos en esta época no hace falta crampones, en su interior hay un lago helado, que en una zona ya se está derritiendo dos columnas pequeñas y una gran cascada blanca. También se ven trozos de columnas de 20 o 30 cm de diámetro que presumiblemente se han caido del techo, y es que incluso aquí dentro que estamos con los forros y tenemos frío, el retroceso de la época glaciar se nota.
A la entrada de la cueva hay un par de vivacs que en caso de tormenta estarán un poco resguardados.
Al salir las nubes ya tapan las cumbres y ante la dificultad de llegar a la Brecha de Rolando y que esté nublado y además que tampoco se pueda bajar porque en la cara norte habrá más nieve, decidimos que en vez de volver por Bujaruelo, bajabamos por la senda de Las Flores directamente a la Pradera de Ordesa.
A las 14:45 bajamos en dirección al Collado del descargador para dormir lo más cerca posible del camino de Senda de las Flores, en el mapa aparece que hay que bordear dos lagos, aunque atajamos y los cruzamos por encima de un lecho a ratos de fianas piedras y a ratos de un manto herboso y blandito. En estos puntos no hay donde coger agua a no ser que subas a los pies de algún nevero, de camino pudimos ver una manada de sarrios que se metían en alguna grieta a chupar la roca.
Los sarrios o rebecos del Pirineo, desde lejos parecen cervatillos, por el tamaño, pero si te acercas se distingue sobre todo por los cuernos que son cabras.
Vamos descendiendo tranquilamente, creando nuestro propio camino, hasta que llega un punto que el camino desciende bruscamente y se pierde entre rocas blancas, por fin encontramos un hito que nos guía por una zona empinada con algún destrepe hasta que llegamos a una depresión en donde si siguieramos llegaríamos a las clavijas de Cotatuero. Estamos a 2320 m y buscamos otros hitos que se dirijan el este, por intuición seguimos en esta dirección por una zona en la que el camino se pierde contínuamente y da la impresión que hay hitos de muchos caminos que continumente se entrecruzan, llega un momento que no sabemos si habremos bajado mucho, si nos encontraremos algún destrepe imposible, si habrá agua en algún sitio, ... así que me adelanto un poco y veo que a lo lejos hay unos acampados, voy a preguntarles y me confirman que es el camino de la faja de Las Flores y que el agua está como a unos 10 minutos. Vuelvo a por la mochila y a por Jaime y Sara y seguimos por el camino, les sobrepasamos y cuando vemos una zona llana relativamente cerca del único torrente que baja de un nevero, decidimos parar y plantar la tienda.
Son las 6 de la tarde, por hoy ya no tiene sentido avanzar más, un buen sitio para dormir y más o menos cerca del agua. Mientras Jaime y Sara montan la tienda yo me acerco al torrente que baja del nevero y subo por su curso hasta que encuentro el agua antes de que desaparezca. Mientras estiramos ponemos el agua a calentar, va a ser la última noche por lo que nos podemos dar un festín, de primero fideos chinos de gambas, luego los dos yatecomos que nos quedan y de postre un sopistan para irnos calentitos al saco.
Día 5 : 12 - julio - 2020
Esta noche ha sido más fresca que las anteriores, desyunamos dentro del saco y como en la noche anterior mientras Sara y Jaime desmontan la tienda, yo voy a buscar agua, pero esta vez tuve que subir por lo menos 5 minutos más alto para encontrar agua, el nevero se había derretido durante la noche y el agua se filtraba antes.
Nos ponemos en marcha antes que otros días a las 8:30 ya estabamos en camino y el sol nos calentaba, estabamos en el camino correcto, nos encontramos con varios grupos y nos dijeron que teniamos que seguir los hitos hacia la punta que se vía al fondo.
Sin problemas inicialmente seguimos los hitos, aunque llega un momento que se pierden o se confunden con distintos caminos, en cualquier caso vamos siempre en dirección a lo que es la punta Gallinero. En algún momento vemos un hito y para llegar hasta el hay que destrepar, cruzar un nevero y fijarse bien para no volver a perder el camino, en cualquier caso simplemente hay que ir en dirección a la punta en la que se intuye que el camino da la vuelta.
De repente a las 9:30 se empieza a nublar, que mala suerte no vamos a poder tener buenas vistas, nos ponemos los ponchos, y en poco tiempo las gotas empiezan a ser más gordas, más intensas, mas duras, es granizo. Buscamos una zona un poco abrigada que por lo menos sea de tierra y no roca, rápidamente nos coordinamos y montamos el doble techo con las varillas, lo cual nos permite refugiarnos y sentirnos más seguros mientras los truenos parecen que van a romper las rocas. Despues de una hora acurrucados, el tiempo entre los rayos y truenos es mayor y se oyen más lejanos. Una hora y media más tarde, nos aseguramos que deja de llover y nos ponemos en marcha, son las 11:00. Delante nuestro había un grupo que también se dirigían por el mismo camino pero ya no les vemos, quiza nos habremos retrasado mucho.
Por fin estamos en Faja de las Flores, si no hubiéramos perdido el camino, no hubiéramos tenido que hacer algun destrepe, que por otro lado eran fáciles y divertidos.
Según avanzamos vemos lás nubes que se forman por la evaporación de la lluvia debajo nuestra, al principio vamos por encima del perfecto circo glacira de Cotatuero, y cuando el camino se hace más estrecho vemos todo el valle de Ordesa, con la cumbre del Monte Perdido presidíendolo al fondo, y como todos los días con una nube agarrada a su cumbre.
Aunque es muy aéreo, el camino no tiene dificultad, incluso con la cantidad de agua que ha caido, el terreno no está resbaladizo, las vistas son impresionantes.
A las 12:30 de nuevo se oyen truenos lejanos, las nuves pasan de largo por encima de nuestras cabezas, pensamos que la tormenta se habrá desplazado a otro valle, empieza a llover ligeramente y nos ponemos los ponchos que llevamos a mano, hasta que de repente vemos como el valle se llena de nuves, que empiezan a subir y la lluvia compienza a ser más intensa. Aprovechando que esta parte del camino tiene cornisas y abrigos en la roca, decidimos que mejor nos paramos y esperamos a que pase la tormenta.
Los truenos lejanos ahora están encima de nosotros y vemos los rayos caer delante nuestro, empieza a granizar con fuerza pero no pasa nada, nos hemos abrigado con la camiseta térmica, forro, abrigo y donde estamos no llega el agua. La temperatura ha caido bruscamente, y nos apretujamos contra la roca tapados por el saco extendido. El granizo da paso a chorros de agua que son batidos por el viento, saco el doble techo para que no se moje el saco, aquí no hay sitio para montar las varillas, entre tanto lo único que vemos es un espacio blanco y una cascada que se ha formado por encima de nuestra roca que afortunadamente apenas nos salpica. Ya habíamos comido antes por lo que para entretenernos nos comemos los chupachup gigantes que Sara nos advierte que guardemos el papel porque duran mucho. Al final Jaime y Sara, tapados con el doble techo acaban durmiendose. Yo permanezco vigilante y aunque parece que ha dejado de llover fuerte, todavía se ven cascadas que salpican el camino. A las 14:30 viene un gruo de jovenes totalmente calados incluso aunque lleven capas de agua, la tormente les ha pillado en el primer tramo, donde no hay sitio para resguardecerse y si paran se quedarían helados. Aprovechamos para levantarnos y seguir. Un poco más adelante hay otro grupo de montañeros más experimentados, que la tormenta les ha pillado justo en las clavijas, son un grupo de 6 y la mitad no habían bajado por lo que decidieron volver a subir a refugiarse en este punto que está habilitado a modo de vivaq. Nos dicen que han llamado a la guardia civil y les ha dicho que a las 18:00 se prevee otra tormenta y les aconsejan que bajen en cuanto puedan por la Fajeta en vez de las Clavijas de Salarons. Nos ofrecen acompañarnos si esperamos a que se preparen, así que eso hacemos.
Salimos un poco antes que ellos para no retrasarles y sin prblemas seguimos el camino de bajada que está bien marcado hasta la señalización de La Fajeta o Clavijas, en ambos casos dice que hay zonas de destrepe. Seguimos delante por el camino de la Fajeta, el sol empieza a calentar y nos quitamos la ropa de abrigo.
El destrepe por la Fajeta tiene pasos que se pueden considerar poco difíciles pero si muy expuestos, en algún punto se pierde el camino y hay que retroceder a volver a buscar los hitos, hasta que llegamos a la base del bosque justo en el punto que se cruza un torrente que por supuesto está muy crecido. Aprovechamos para coger agua, descansar y comer. A partir de aquí el camino de bajada es cansado pero sin dificultad, como la previsión era de lluvia sobre las 18:00 tampoco perdemos mucho tiempo y anque Sara se queja de que le duele la rotula, sigue sin para y a buen ritmo y a las 19:00 hemos llegado al coche.
Descansamos, metemos los pies en el agua helada del río Arazas, nos cambiamos y a las 20:00 salimos hacia Madrid. En 5 horas de coche llegamos a casa.
Resumen: Partimos por encima del circo de Cotatuero en lo que algunos mapas aparece como Mondarruego a a las 8:30, en 90 minutos se llegaría al inicio del camino de la Faja de las Flores. Nosotros paramos otros 90 minutos por la tormenta. La Senda de las Flores se tardaría en hacer 2 horas y luego bajar hasta la bifurcación de la Fajeta 1 hora y otras 2 horas hasta el aparcamiento. En total 7 horas de caminata y 1000 m de desnivel negativo, aunque el cansancio acumulado es desde las 8:00 hasta las 19:00 ¡casi 11 horas!
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